Alumnos, amas de casa y trabajadores son asaltados con frecuencia en el camino viejo de Temamatla
*Pobladores demandam su alumbrado y más presencia de la policía de Chalco, Temamatla y Cocotitlán
Jorge Martínez Cordero
CHALCO, Méx.-Decenas de estudiantes, trabajadores y amas de casa caminan diario por el camino viejo a Temamatla, que los lleva a escuelas, mercados y a la carretera para abordar el transporte público.
El largo y solitario tramo de terracería que conecta a los municipios de Chalco, Cocotitlán y Temamatla, corre junto a un río de aguas negras, lo que hace aún más peligroso su recorrido, especialmente por las noches.
De acuerdo con vecinos, la falta de alumbrado, patrullajes y pavimentación ha convertido el sitio en una zona insegura donde son frecuentes los asaltos.
“Por conocidos que tengo en esa colonia y que luego voy a visitar me he enterado de que hay muchos robos y los delincuentes suelen huir hacia el río para esconderse entre los montones de tierra”, relató Rosalba Benítez, habitante de la cercana unidad habitacional Paseos de Chalco.
Añadió que debido a la ubicación del lugar -límites de Chalco y Cocotitlán-, ninguno de los dos gobiernos municipales han asumido su vigilancia.
“El camino está olvidado; no se sabe de quién es el territorio”, señaló.
Por su parte, Sofía Bernal, ama de casa comentó que diariamente enfrenta el miedo de sufrir algún ataque al recorrer el solitario trayecto.
“Tengo que llevar a mi hijo a la escuela en Cocotitlán y regresar para ir a trabajar a la zona industrial de Chalco, siempre voy con el temor de que algo me pase”, expresó.
Las vecinas coincidieron en que otro riesgo constante son los niños que acostumbran jugar cerca del río. “Nos preocupa que se acerquen demasiado al agua o se escondan entre los montes, porque en cualquier momento podría ocurrir un accidente y nadie se daría cuenta”, dijo Bernal.
Además de peatones, algunos habitantes utilizan bicicletas para trasladarse, lo que representa otra dificultad por el terreno irregular y la falta total de iluminación, condiciones que aumentan los peligros al caer la noche.
