Laberinto: ¿Fue necesario el despido del comisario de la policía de Ozumba?
Joel Avelar
LA COLUMNA DE HOY NO PRETENDE hacer una apología de Heriberto Ramírez de la Rosa, destituido el viernes pasado como ex comisario de la policía de Ozumba, debido a la presión vecinal ejercida en contra del alcalde Ricardo Valencia Valencia luego del feminicidio de Iztel Díaz, pero sí dar a conocer que, gracias a sus trabajos de investigación iniciados minutos después de haber recibido la denuncia de desaparición, se detuvo al presunto responsable y el cadáver fue localizado, luego de haber confesado su autoría.
PERSONALMENTE, TENGO ELEMENTOS PARA asegurar que su destitución por cabildo fue innecesaria e injusta, pero sin duda que el alcalde no le convino enfrentar a la población, ávida de sangre, que de todos modos causó destrozos a su casa y en la alcaldía.
QUIENES EXIGIERON SU DISTITUCIÓN, que no fueron ni los padres ni el hermano de la víctima, -quienes posteriormente se deslindaron de los destrozos que se realizaron en el municipio-, lo hicieron molestos por presuntos comentarios que hizo Heriberto cuando se le exigió buscar a la joven, encarándolo en la casa de ella al día siguiente de su desaparición.
EN ESOS MOMENTOS, DERIVADO DE LAS PRIMERAS pesquisas realizadas, Ramírez de la Rosa ya tenía indicios suficientes que apuntaban al responsable del feminicidio, pero que no podía darlo a conocer a la comunidad o, particularmente, a quienes le exigieron encontrar a la joven para no entorpecer lo que se investigaba, y mucho menos, alertar al presunto responsable.
EN FORMA PERENTORIA Y OFENSIVA, LOS VECINOS LE exigieron dar con el paradero de Itzel; y lo hizo, aunque lamentablemente ya sin vida, pues sus primeras indagatorias, luego de recibir la denuncia de desaparición de la madre de Itzel, lo llevaron inmediatamente a sospechar de José Ignacio y a su casa en Tepetlixpa.
EL TRABAJO DEL EXCOMISARIO fue fundamental y decisivo, para que el joven de 22 años fuera detenido y el cadáver de Itzel localizado, me aseguró un policía de investigación de la Fiscalía Regional de Amecameca.
LAMENTABLEMENTE, EL HILO SE CORTA por lo más delgado y el alcalde no aguantó la presión de los vecinos, cesando al jefe de la policía.
A LAS 11 DE LA NOCHE DEL MARTES SIETE de octubre, la mamá de Itzel se presentó al centro de mando de la policía de Ozumba a reportar su desaparición y a solicitar apoyo para su búsqueda.
LA DENUNCIA FUE ATENDIDA POR LA responsable de la Célula de Búsqueda de Personas Desaparecidas de ese municipio, quien minutos después, a las 23:22 horas, después de hacerle varias preguntas a la mamá, publicó en la cuenta oficial del municipio la ficha correspondiente, al mismo tiempo que se enviaba a otras dependencias y policías de municipios cercanos.
ENTERADO DE LO ANTERIOR, EL MISMO HERIBERTO empezó sus investigaciones.
SI ALGO TENÍAN QUE RECLAMARLE AL PRESIDENTE, no a Heriberto, los familiares y vecinos de Itzel, fue su tardía reacción para acudir a la fiscalía de Amecameca la madrugada del miércoles ocho, donde ya se encontraban, para estar a su lado, para mostrarles personalmente su solidaridad y acompañarlos en esos momentos difíciles; lo hizo un día después, el jueves 9, en el centro de Justicia de Valle de Chalco, a donde llegó proveniente de Toluca.
DESESPERADA POR NO LOCALIZAR A SU HIJA, luego de marcarle y mandarle mensajes a su celular y al del presunto homicida (quien por cierto le respondió que no sabía nada de ella), y tras de presentar la denuncia en el centro de mando, la mamá se trasladó a la fiscalía de Amecameca a iniciar la denuncia de desaparición, lo cual hizo alrededor de las dos de la madrugada del miércoles ocho.
DEBO PRECISAR ANTES, QUE DE acuerdo a la fuente de la FGJEM, la última señal que registró el celular de Itzel fue a las 16:35 horas del martes siete.
LA MISMA FUENTE RECONOCIÓ QUE de no haber sido por el comisario de Ozumba, hoy, posiblemente, el homicida seguiría en libertad e Itzel no hubiese podido ser hallada.
“JOSÉ IGNACIO REALIZÓ SU CONFESESIÓN DE HABER MATADO A LA JOVEN alrededor de las cinco de la mañana del jueves nueve; llegó al centro de justicia de Chalco acompañado de su mamá alrededor de las 17 horas del miércoles ocho”, me puntualizó.
EL AGENTE CITÓ QUE, EN HORAS DE LA MADRUGADA, VIO en el centro de justicia de Valle de Chalco al presidente municipal Ricardo Valencia y al diputado Valentín Martínez, acompañando a los padres de la joven.
“ELLOS FUERON LOS PRIMEROS en saber que José Ignacio ya había confesado y revelado el lugar donde tenía el cadáver de Itzel, pero debido a la hora, no fue posible que un juez liberara la orden de cateo para revisar su casa en Tepetlixpa, lo cual sucedió después del mediodía del jueves”, me dio a conocer.
COMENTÓ QUE EL FISCAL REGIONAL LES recomendó hablar personalmente con la gobernadora para que le ayudara a agilizar la orden de cateo, desconociendo si el diputado y el alcalde pudieron hacerlo por separado.
EL COLUMNISTA FUE INFORMADO QUE RICARDO VALENCIA sí pidió el apoyo de una legisladora de su partido, pero de Valentín, desconozco si hizo lo mismo,
LA MISMA FUENTE ME DIO DETALLES de la forma como Itzel fue privada de la vida, que no dará a conocer por varios motivos. Solamente diré que tenía dos fracturas en la pierna derecha…