OPINIÓN: Se dice que: La nueva aritmética del poder

Ad Noticias

**La teoría de los campos de Bourdieu ayuda a entenderlo: el capital simbólico que antes acumulaban —prestigio, redes de poder, capacidad de veto— se ha devaluado frente a una nueva lógica de distribución de recursos y legitimidad

ISSEMyM: el castillo que cruje

El ISSEMyM enfrenta una tormenta que ya no cabe en el expediente del olvido. La denuncia de corrupción expuesta en la mañanera del miércoles obligó a la presidenta Claudia Sheinbaum a instruir a Raquel Buenrostro, la zar anticorrupción, para intervenir. El golpe es demoledor para Ignacio “Nocha” Salgado, director general del instituto, que carga con meses de desgaste y la renuncia —ocurrida semanas atrás— de su contralor interno, un síntoma claro de que el control se perdió desde dentro. En el centro del huracán están las compras: contratos millonarios, licitaciones amañadas, adjudicaciones con sobreprecio y una red de proveedores que orbitan intereses políticos más amplios. Pensionados, sindicatos y empleados llevan años señalando manejos discrecionales y pensiones selectivas, pero la institución siempre apostó al silencio y a la desmemoria como estrategia de supervivencia. Hoy, esa apuesta se rompe: con Buenrostro interviniendo, lo que salga a la luz puede arrastrar no solo a Salgado, sino a Finanzas, operadores políticos y contratistas de alto calibre. El castillo cruje y nadie controla el derrumbe.

**

UAEMex, el ocaso de las vacas sagradas

Uno de los síntomas más reveladores del cambio institucional en la UAEMex es la pérdida de influencia de los ex rectores, antaño intocables y hoy reducidos a actores periféricos. La teoría de los campos de Bourdieu ayuda a entenderlo: el capital simbólico que antes acumulaban —prestigio, redes de poder, capacidad de veto— se ha devaluado frente a una nueva lógica de distribución de recursos y legitimidad. En el diseño emergente, su voz pesa lo mismo que la de cualquier universitario; ya no definen ni nombran, y sus pactos históricos pierden eficacia. No es casual: se trata de una reconfiguración del “campo académico” donde las jerarquías tradicionales ceden paso a dinámicas más horizontales, aunque no necesariamente más democráticas. La caída de las “vacas sagradas” no solo es un fenómeno cultural, sino político: erosiona la vieja matriz de control que articulaba decisiones estratégicas desde las sombras y abre el espacio para nuevas coaliciones, más fragmentadas, más inciertas. Para algunos, es emancipación; para otros, es la antesala del caos. Lo cierto es que la Universidad ya no les pertenece.

**

Legislatura LXII: la nueva aritmética del poder

La LXII Legislatura mexiquense inicia su segundo año con un hecho político central: la consolidación del bloque delfinista que encabeza Francisco Vázquez. Tras un primer año de tensiones soterradas y negociaciones discretas, Morena logró alinear a la mayoría y perfilar una bancada cohesionada que actúa como auténtico soporte del gobierno del cambio que lidera Delfina Gómez. La apuesta es clara: blindar desde el Congreso las reformas estratégicas y sostener la narrativa de transformación frente a una oposición fragmentada y sin proyecto. En términos de ciencia política, se trata de un caso de “sincronización institucional”: el Ejecutivo y el Legislativo operan bajo una lógica de complementariedad que les permite acelerar decisiones y reducir vetos internos. Sin embargo, esta misma concentración de poder redefine el equilibrio democrático: los contrapesos se diluyen, los consensos se negocian hacia dentro y el pluralismo formal cede ante la disciplina política. Para Delfina, la legislatura se convierte en la palanca principal de gobernabilidad; para la oposición, en un terreno cada vez más estrecho y hostil. El tablero legislativo se ha reconfigurado y, por primera vez en décadas, las vacas sagradas no están en el Congreso.

**

Poder Judicial: Macedo y el desafío de la justicia

La llegada de Héctor Macedo a la presidencia del Poder Judicial del Estado de México no es un simple relevo administrativo: es una jugada estratégica dentro del proyecto de cambio que impulsa Delfina Gómez. Macedo se perfila como un presidente fuerte, alineado al anhelo colectivo de transformar un sistema históricamente marcado por la opacidad, la corrupción y el privilegio. Como advertía Luigi Ferrajoli, “no hay democracia sin garantías efectivas de derechos”, y el Edomex arrastra una deuda profunda con su ciudadanía: un sistema judicial percibido como lento, capturado por élites y funcional a intereses de poder. Macedo enfrenta un doble desafío. Primero, consolidar un cambio estructural que redefina las prácticas internas: independencia real de los jueces, transparencia en las designaciones y control efectivo de la corrupción. Segundo, recuperar la confianza ciudadana en la justicia como bien público, tal como planteaba Norberto Bobbio: “la democracia se mide por las promesas de igualdad que es capaz de cumplir”. Si logra articular un modelo que combine eficiencia, imparcialidad y acceso universal, el Poder Judicial podría convertirse en la piedra angular de un nuevo pacto social. Si fracasa, se confirmará la sospecha de que el cambio fue apenas retórico. El momento es histórico, y Macedo lo sabe: o transforma al Poder Judicial o quedará atrapado por los mismos defectos que hoy promete enterrar.

**

Aeropuerto de Toluca: terminal de lona rumbo al Mundial

El Aeropuerto Internacional de Toluca es, hoy, una vergüenza disfrazada de proyecto estratégico. Tiene una pista de 4 310 metros y tecnología ILS CAT IIIA de estándar internacional, pero su terminal parece un campamento provisional: techos de lona, servicios mínimos y un aire de abandono que contradice cualquier ambición global. El problema es estructural: Aleatica —antes OHL— controla el 49 % de la propiedad, mientras el gobierno estatal posee apenas el 26 % y ASA el 25 %. Esa asimetría privatizó las decisiones y convirtió al aeropuerto en rehén de una concesionaria que invierte poco y exige mucho. El gobierno federal intentó recomprar la participación privada, pero abandonó la operación por el precio desorbitado que pedía Aleatica; así, todo proyecto de modernización quedó en el limbo. A menos de dos años del Mundial 2026, cuando México recibirá miles de visitantes, Toluca se perfila como la “puerta de entrada” más deslucida del país. Mientras el discurso oficial promete un Sistema Metropolitano de Aeropuertos de clase mundial, la realidad es una central “avionera” condenada a la irrelevancia. Si esta es la carta de presentación ante el planeta, el Mundial corre el riesgo de iniciar con pena ajena desde el aterrizaje.