Reciben a los fieles difuntos con pétalos, velas, incienso y flores de cempasúchil en el panteón de Temamatla
SAN JUAN TEMAMATLA, Méx.- Con flores de cempasúchil, papel picado y calaveritas multicolores, estudiantes de secundaria y preparatoria dieron vida al atrio de la iglesia de San Juan Bautista, donde presentaron sus altares dedicados a los fieles difuntos.
Guiados por sus profesores, los jóvenes colocaron coloridas ofrendas con veladoras, frutas de temporada, pan de muerto y fotografías de seres queridos. Cada altar contó una historia distinta, pero todos compartieron un mismo propósito: mantener viva la esencia del Día de Muertos en las nuevas generaciones.
A la jornada se sumaron trabajadores del DIF municipal y del gobierno local, quienes también elaboraron ofrendas con elementos tradicionales.
Destacó la presentada por la primaria Bicentenario de la Independencia de México, donde la mayoría de los objetos fueron creados por los propios alumnos, mostrando creatividad y compromiso.
Uno de los altares que más llamó la atención fue donde se colocó un féretro real con un muñeco de utilería que representaba a un campesino; sobre el ataúd se dispusieron herramientas y objetos personales, evocando la vida cotidiana de quienes dedican su esfuerzo al campo.
La ofrenda elaborada por el DIF Temamatla fue dedicada con especial cariño a los adultos mayores del municipio que fallecieron en meses recientes, gesto que conmovió a los visitantes.
La profesora Guadalupe Sánchez, docente de nivel secundaria resaltó la importancia de inculcar el valor de las tradiciones mexicanas.
“Es fundamental que los jóvenes conozcan nuestras raíces; a veces saben más del halloween que del Día de Muertos, por eso debemos enseñarles desde casa y desde la escuela el significado de estas celebraciones”, expresó.
Agregó que este tipo de actividades no solo fomentan la creatividad, sino también el sentido de pertenencia. “Involucrar a los jóvenes en nuestra cultura es sembrar amor por lo nuestro”, afirmó.
Durante toda la jornada, familias y visitantes recorrieron los altares, tomaron fotografías y compartieron momentos de reflexión y alegría. Entre aromas de incienso y pétalos de cempasúchil, el espíritu del Día de Muertos volvió a sentirse vivo en el corazón de Temamatla.
